Es un privilegio disponer de frutas y hortalizas frescas y variadas durante todo el año; tener el clima ideal para producir aceite de oliva, reconocido como la mejor y más natural de las grasas; estar rodeados por tres mares distintos, por costas variadas, suaves y playeras, en unos casos, y escarpadas y batidas en otros; tener un ecosistema casi único en el mundo y además irreproducible, que es la dehesa; disponer de profundos valles junto a elevadas montañas, buenos pastos, monte bajo y bosque; cultivar grandes extensiones de viñedo, que caracterizan el paisaje y cumplen la principal condición que puso Leonardo da Vinci a un territorio, ser tierra en la que se produce el vino, para que mereciese la pena vivir en él.
Es un privilegio disponer de frutas y hortalizas frescas y variadas durante todo el año; tener el clima ideal para producir aceite de oliva, reconocido como la mejor y más natural de las grasas; estar rodeados por tres mares distintos, por costas variadas, suaves y playeras, en unos casos, y escarpadas y batidas en otros; tener un ecosistema casi único en el mundo y además irreproducible, que es la dehesa; disponer de profundos valles junto a elevadas montañas, buenos pastos, monte bajo y bosque; cultivar grandes extensiones de viñedo, que caracterizan el paisaje y cumplen la principal condición que puso Leonardo da Vinci a un territorio, ser tierra en la que se produce el vino, para que mereciese la pena vivir en él.
Por nuestro territorio han pasado muchas culturas y de todas ellas aprendimos. Tuvimos además el mérito de completar el mundo y hacer posible un muy amplio intercambio de alimentos, que mejoraron las posibilidades de combatir el hambre y disfrutar de sabores desconocidos antes y generalizados después. Casi todas las especies animales y vegetales que llegaron a América fueron llevadas por los españoles y prácticamente la totalidad de las que vinieron a Europa se descubrieron por españoles y se aclimataron en España antes de que las conociese el resto del mundo.
Este libro es un homenaje a nuestros productos y a los que durante muchos años supieron producirlos, conservarlos y procesarlos, y para los que, basados en una cocina muy imaginativa y a veces frugal, consiguieron elevarla a tal nivel que, muy a finales del siglo XX y principios del XXI, el mundo haya reconocido los inmensos méritos de la alimentación, la nutrición y la gastronomía española.
Colección
Libros Singulares (LS)
Código
3432542
I.S.B.N.
978-84-206-6273-2
Publicación
28/04/2008
Clasificación IBIC
WBT
Formato
Papel
Páginas
400
Autor
Ismael Díaz Yubero
ISMAEL DÍAZ YUBERO, de profesión veterinario, ha sido director general de Política Alimentaria, Pesca y Alimentación, de Salud Alimentaria, y del Instituto Nacional de Consumo. Representante permanente de España ante la FAO, consejero de Agricultura, Pesca y Alimentación en la Embajada de España en Roma, presidente del INDO, y director general de Agricultura y Alimentación en la Comunidad de Madrid, es autor de numerosos libros relacionados con los alimentos. Premio Nacional de Gastronomía, Premio Gregorio Marañón de la Academia Española de Gastronomía, Premio Alimentos de España, miembro de la Academia Española de Gastronomía y de diversas Academias de Veterinaria.